lunes, 30 de junio de 2014

El autoelogio

El autoelogio es una manera de hablarte positivamente.

Es una forma de contemplarte y de reconocer tus actuaciones adecuadas.

No hace falta, ni es necesario que lo hagas en voz alta y en público; serás sancionado y duramente criticado.

La autoestimulación puede ser más poderosa en sus efectos que la felicitación o el elogio que viene de afuera.

Permite el fortalecimiento de la autoestima, genera buenos hábitos de higiene mental y, lo más importante, ayuda a que la conducta autoelogiada se siga dando en el futuro.

Parecería que la sociedad considerara el autoelogio como dañino, inútil o superfluo: el ego no debe alimentarse mucho y el deber no necesita felicitaciones.

De dónde provienen estas absurdas e irracionales ideas? Por lo general se considera que es más digno dar que recibir y es más importante el otro que uno.

El autoelogio reprenta la máxima expresión de "yo con yo" . Como decía un personaje de Mafalda: "Para mí lo más importante soy yo" .

El amor dirigido a uno mismo es visto como "egolatría" y el amor dirigido a otros como "altruismo". Sin embargo, el quererse también puede ser visto como amor propio y como un acto de dignidad.

¿Llevaste a cabo bien tu deber?, ¡Felicítate!¡Regálate un "muy bien"! Tu principal deber es para contigo.

¡Date un abrazo! Si tu diálogo interno es el de la obligación absoluta, no te sentirás con el derecho de elogiarte. Lo vivirás como un acto de cobardía, dejarás de lado el placer de colocarte medallas cuando tu esfuerzo te acerque a las metas personales.

De todas maneras no está de más que intentes ser cortés contigo mismo, elogiando las cosas materiales que realmente te agradan. Admira las cosas materiales que te rodean y te pertenecen. ¡Felicítate por tenerlas!. Puedes involucrarte en tus propios autoelogios. "Esta camisa me queda bien" "Definitivamente mi casa muestra que tengo buen gusto" "Hoy estoy muy bien vestido" "Sé elegir muy bien a mis amistades", etc.

La autoexpresión de sentimientos positivos nos hace sentir bien, sencillamente porque es agradable el buen trato.

Autoelogiarte por lastimar a alguien, sacar una mala nota o traicionar a un amigo, no te conducirá sino a la autodestrucción.

Finalmente, el autoelogio tiene ventajas que le son propias: es rápido, económico, se puede aplicar cuando y donde uno quiera, no se ve (pero se siente), no es criticable, es de uso exclusivo personal y utilizado con cautela no se desgasta.

Tienes el derecho a la autoexpresión de sentimientos. El lenguaje encubierto es una de las tanta vías de acceso a quererte.

No obstante, hemos sido educados en una cultura que predica el amor hacia los demás y condena el amor propio, olvidando que el primer requisito para querer a otra persona es que cada uno se quiera primero a sí mismo.

Walter Riso

lunes, 23 de junio de 2014

Etapas posteriores a una ruptura de pareja

Frente a una ruptura sentimental suelen aparecer diversas emociones como la tristeza, el enojo, la angustia, la frustración, la ira y la culpa, entre otras. En ocasiones puedes sentir que te encuentras en una montaña rusa emocional en la cual existen días mejores y otros no tan buenos.

Debes tener claro que, al terminar la relación con tu ser amado, atravesarás por un proceso difícil y cambiante que te puede hacer pensar que nunca podrás superarlo; sin embargo, debes tener la certeza de que tarde o temprano lo conseguirás con éxito.

Me gustaría mencionar distintas etapas que podrías atravesar al enfrentarte a una ruptura. Éstas no tienen por qué darse en un orden determinado, ni durar cada una la misma cantidad de tiempo, incluso pueden llegar a solaparse.
  • Estado de shock o impacto: durante estos momentos atraviesas una sensación de paralización e incredulidad a lo sucedido. Te cuesta definir realmente cómo te sientes, puede aparecer una dificultad para conciliar el sueño y pérdida de apetito. Otro de los síntomas posibles es la ansiedad o intranquilidad que te impide concentrarte en tus actividades.
  • Negación: te cuesta aceptar que la relación realmente ha terminado y mantienes una fuerte esperanza de que las cosas podrán solucionarse.
  • Tristeza profunda: aparece un fuerte sentimiento de vacío, desánimo y se tiene la sensación como si te faltara una parte del cuerpo. Esta tristeza no solo la provoca el extrañar a la persona sino también el sentimiento de fracaso del proyecto que se tenía como pareja. En esta etapa debes estar al tanto de si tu tristeza comienza a convertirse en depresión, ya que en este caso es mejor buscar ayuda profesional.
  • Culpa: comienzas a pensar acerca de qué fue lo que falló y sueles hacer un juicio poco objetivo culpándote a ti mismo y teniendo remordimiento por todo aquello que hiciste mal o todo aquello que dejaste de hacer. El aspecto positivo que puede dejarte la culpa es que contribuye a que reflexiones sobre aspectos a mejorar como persona, pero la parte negativa es que puedes llegar a culparte de manera poco ecuánime.
  • Enojo: el que aparezca este sentimiento es totalmente normal e incluso hasta sano, siempre y cuando no te lleve a actuar con venganza o violencia.
  • Aceptación y reconstrucción: se acepta definitivamente que la relación se ha terminado y se comienza a invertir toda esa energía que estaba concentrada en el duelo de la relación hacia uno mismo. La persona nuevamente centra la atención en sí misma y en sus necesidades, mejorando su autoestima y confianza en sí misma.
Regina Vides
Psicología de Pareja
Licda. Psicología Clínica
Magister en Terapia Familiar y de Pareja (España)

martes, 17 de junio de 2014

Miedo a enamorarse de nuevo

Es importante darte otra oportunidad y darle otra oportunidad al amor.

Muchas personas han disfrutado el enamorarse y el compartir en pareja, sin embargo puede ser que hoy sientan miedo de dar ese paso de nuevo, ya sea porque el final de la relación anterior fue dolorosa o porque simplemente no quieren sacrificar su libertad.

Sin duda alguna sabemos que una ruptura amorosa es un proceso doloroso, tanto que se le relaciona con el parecido a vivir un proceso de duelo, aunque muchas veces puede ser igual de difícil de superar, ya que en el duelo la despedida es definitiva, mientras que cuando termina una relación en ocasiones uno de la pareja aún guarda una esperanza, o pasado algún tiempo, puede volver a reencontrarse con la ex pareja e incluso verle en una nueva relación. Todas estas circunstancias pueden en definitiva, llevarte a vivir un proceso doloroso, intolerable, hasta traumático, por lo cual ahora tendrás miedo de volver a enamorarte y decidir no volver a involucrarte emocionalmente con nadie más.

Por otro lado, están las personas que no quieren enamorarse por miedo a perder su libertad, ya que en una relación pasada tenían que rendir cuentas a toda hora, con un cronograma de actividades enlazado al de la pareja para saber qué hacía, cuando y en dónde; por lo que esa relación ha dejado un mal sabor de boca, lo cual genera temor en la persona para enamorarse de nuevo, por miedo a volver a caer en una relación similar en donde no pueda tener amistades, espacio para sí misma pero sobre todo; una relación con ausencia de comprensión, comunicación y confianza.

El miedo no es algo negativo, sólo es un mecanismo de defensa cuando percibimos una situación de riesgo y en este caso nos hace sentir inseguros para protegernos de no volver a revivir esa situación dolorosa o incómoda.

Nadie puede garantizarte que no volverás a sufrir, pero ¿Cómo superar el miedo a volver a enamorarte?
  • Primero debes aceptar que tienes una limitación emocional que es importante que trabajes
  • Haz una auto evaluación para determinar los miedos que debes afrontar
  • Recuerda que evitar a lo que le temes, no solucionará el problema
  • Es indispensable que empieces a expresar todo tu malestar, de esta forma disminuirá tu ansiedad y será más fácil afrontar tus temores
  • La autoconfianza debe ser de los pequeños cambios que debes empezar a implementar para sentir mayor seguridad en las decisiones que tomes.
Recuerda que la vida consiste en experimentar, aprender y cambiar, sin estos aspectos no hay crecimiento personal, no permitas que el miedo sea la piedra de tropiezo en tu camino para darte una nueva oportunidad de enamorarte.

Sitúate en el aquí y ahora, eso hará que manejes menos ansiedad al momento de conocer a alguna persona que te llame la atención y así se interpondrá tu miedo. Es mejor no pensar tanto en el futuro, porque el hecho de no saber qué pasará o imaginar cómo se tornará la situación hará que tus miedos salgan a flote.

"No tengas miedo de enamorarte, si aciertas, sonreirás, si algo falla, tendrás una experiencia más".

Mónica Godínez
Psicología Clínica
Psicóloga Clínica, Fundadora de Reset Psicología Clínica, Asesora de Desarrollo Humano

jueves, 12 de junio de 2014

Auto sabotaje, consejos para aprender a querernos más

Cuantas veces no nos sentimos frustrados por que no logramos lo que nos proponemos. ¿Será que estamos haciendo nuestro mayor esfuerzo? O ¿será que en verdad la vida se confabula en nuestra contra para que nada nos salga bien?

En psicología, el término auto sabotaje significa hacer inconscientemente cosas que nos impiden lograr nuestras metas, y existen distintas actitudes que demuestran que ejercemos el auto sabotaje y sin darnos cuenta, por ejemplo:
  • No acabar las cosas
  • Dejar a medias lo que comenzamos
  • Posponer todo hasta el último momento
  • Retrasar todo y por eso, no lo terminamos correctamente
  • Ser un "perfeccionista" y como queremos hacerlo todo perfecto, muchas veces, sencillamente no lo hacemos o no lo terminamos
  • Poner excusas de cualquier tipo
  • Buscamos montones de excusas externas para no terminar nada
Si nos pusiéramos a pensar e hiciéramos un análisis detallado y honesto de nuestros "fracasos", probablemente nos daríamos cuenta de que, muchas veces, no logramos lo que tanto deseamos, por algo que nosotros mismos hicimos o dejamos de hacer.

Un ejemplo muy común, es cuando alguien que quiere adelgazar, pero a la primera oportunidad se ve tentado por un pastelito, y destruye su dieta. Seguido de esto está la frase "solo un pedacito no me va a engordar, ¡comienzo la dieta el lunes!"

Las causas del auto sabotaje son muchas:

  1. Nos ponemos excusas para no esforzarnos.
  2. No sabemos priorizar lo realmente importante y nos dejamos llevar por lo urgente.
  3. Reaccionamos a los estímulos externos y nos falta autocontrol.
  4. Nadie nos motivaba a ser mejores cuando éramos niños, o por el contrario nos sentíamos presionados para lograr el éxito y hemos recibido el mensaje de que nunca era suficiente.
  5. No sabemos lo que realmente queremos.
  6. Tenemos una baja autoestima y no nos sentimos seguros de nuestras capacidades.
  7. Tenemos creencias limitadoras como "no merezco tener éxito", "si tengo éxito me van a envidiar", "no soy lo suficientemente...", "es mejor no esforzarme, porque si me esfuerzo y no lo consigo me voy a sentir incapaz", etc.
  8. Miedo al fracaso.
  9. Miedo al cambio y a salir de la zona de confort.
  10. Conflictos inconscientes. A veces conscientemente queremos algo, pero una parte de nosotros, a veces inconsciente, quiere conseguir otro objetivo que entra en contradicción con el primero. Por ejemplo, por un lado queremos adelgazar y por otro queremos darnos placer mediante la comida.
  11. Miedo a no cumplir las expectativas de los demás.
Para combatir el auto sabotaje, y manejar en forma consciente este mecanismo mental prueba hacer lo siguiente:

Ayúdate con estas preguntas:
  • ¿Qué es lo que conscientemente me digo que quiero ser, hacer o tener en la vida?
  • ¿De qué forma es que estoy saboteándolo?
  • ¿De qué manera ocurre este sabotaje en mi mente?
  • ¿Qué me estoy diciendo a mí mismo cuando lo hago?
Una vez reunidos tus pensamientos, busca descubrir en ellas la necesidad oculta que hay detrás de tu mecanismo saboteador.
  • ¿Qué gano?
  • ¿En qué me beneficia el auto sabotaje?
  • ¿Para qué lo hago?
Siempre hay un beneficio oculto tras una acción!!

Ejecuta una acción para cubrir esa necesidad. Proponte a ti mismo un trabajo de acción para cambiar tu estado actual de manera que logres una coherencia entre tus necesidades y tus acciones. Ten en cuenta tus pensamientos, tu cuerpo y tus emociones.

María Inés Elgueta
Educación Especial
Licenciada en Psicología
Especialización en Abordaje Integral a las Adicciones a Sustancias Lícitas e Ilícitas
Especialización en ABA (Applied Behavior Analysis)

martes, 10 de junio de 2014

¡Se acabó!

Todos pasamos por momentos difíciles, una crisis económica, una ruptura amorosa, la pérdida de un ser querido, etc. Estas son situaciones que no podemos evitar, pero está en nosotros el tomar la decisión de quedarnos en el sufrimiento o darle la vuelta a la moneda y buscar la felicidad. Debemos buscar nuestro líder interno y autoafirmarnos que tenemos la capacidad de lograr todo lo que nos propongamos.

Evitemos sentir compasión por nosotros mismos, no debemos caer en un papel de víctima, sino debemos ser realistas y enfrentar el sufrimiento. Como todo en esta vida, la curación necesita un proceso, no viene de la noche a la mañana. Para ello les comparto unas herramientas sencillas de aplicar:

La aceptación: no nos sirve de nada negar la situación que nos está afectando, debemos aceptarla y reconocer que no podemos cambiar nuestra realidad. Este es el primer paso hacia la curación.

Duelo: aunque parezca irónico, es necesario pasar por una etapa de duelo. Cuando pasamos por una ruptura amorosa, la pérdida de un trabajo, un momento difícil en general, es necesario que nos tomemos un tiempo para asimilarlo bien. Démonos un espacio, un respiro, un momento para pensar.

Mantener pensamientos positivos: el preguntarnos ¿por qué a mí? ¿Qué hice para merecer esto? es completamente inútil, sería de mayor utilidad el poder ver el lado positivo del asunto, un ciclo se cerró, pero uno nuevo se abrirá. Escucha consejos de personas cercanas que estén interesados en apoyarte.

Nuevos proyectos: aprovecha tu tiempo, haz una lista de cosas que te interesan o cosas que tengas pendientes y busca involucrarte en nuevos proyectos que den un nuevo sentido a tu vida. Conoce gente nueva, lee, renueva tu esencia.

Estas son algunas herramientas sencillas que podemos poner en práctica en situaciones difíciles, pero recuerda que todo debe empezar con el deseo y la voluntad de querer superar lo que nos perturba. Es recomendable monitorear si tu malestar persiste por un tiempo prolongado, tal vez sería conveniente buscar la ayuda de un profesional.

María Inés Elgueta
Educación Especial
Licenciada en Psicología
Especialización en Abordaje Integral a las Adicciones a Sustancias Lícitas e Ilícitas
Especialización en ABA (Applied Behavior Analysis)

domingo, 8 de junio de 2014

Tipos de rupturas

Ruptura rápida: La mujer se va en cuanto aparecen las primeras manifestaciones de violencia.
Tiene el grado de estudios necesario para encontrar un trabajo.
Tiene amigos con los que contar.
No tiene pasado familiar de violencia.
Tiene alternativas, conoce recursos y tiene acceso a ellos.
Tiene una buena autoestima.

Ruptura a disgustos: Se separa tras varios años de soportar violencia, después de haber intentado salvar la relación. Reduce su culpabilidad puesto que ha hecho todo lo que ella pensaba que podía salvar su pareja.
Ha puesto medios para poner fin a la violencia.
Ha buscado ayuda: psiquiátrica, alcohólicos anónimos, etc…
Ha intentado salvar su matrimonio.
Su decisión ha sido pensada y meditada.
Evalúa que el precio del abuso es demasiado alto para ella y los niños, y decide irse.

Ruptura evolutiva:
Abandona la relación y vuelve sucesivas veces, hasta adquirir el convencimiento de que es preferible afrontarlos problemas derivados de la separación que soportar la tortura de semejante relación.
La violencia se añade a la dificultad de irse.
Tiene baja autoestima
No conoce los recursos.
Tiene dificultades económicas.
Tiene pocas posibilidades de trabajar fuera de casa.
Tiene la responsabilidad de los hijos teme la soledad.
Se siente aislada.

Así pues la experiencia de la ruptura debe haber permitido algunas adquisiciones o aportado respuestas importantes a la mujer maltratada. Por su parte, el agresor, se siente reforzado por el regreso de su víctima (hace lo que quiere, de todos modos ella vuelve siempre). Se siente con autoridad para reiniciar, en algún momento, comportamientos violentos puesto que sabe que la víctima le pertenece.

Fuente: 
Campaña Por La No Violencia Contra Las Mujeres

sábado, 7 de junio de 2014

Sólo para tus ojos por Rose Mary Espinosa

Pezones rojos y erectos. Vulvas y glandes hinchados. Carnes sinuosas, desparramadas. Vello púbico abundante y ofrendado. . . Ah, los genitales en la obra de Egon Schiele.

Lo primero que conocí del pintor austriaco fue una postal de su famosa pintura Mujer reclinada: ahí la modelo está acostada, con las piernas abiertas y los brazos hacia atrás y, por entre la sábana que la cubre, se asoman los senos y parte del sexo. En ese entonces, la imagen me resultó tan perturbadora como fascinante: lo frontal y desparpajado, pero, en especial, una cierta distancia emocional en el gesto.

Varios años después la he visto físicamente en el espléndido museo Leopold y he comprendido por qué el escritor Héctor Orestes Aguilar, que vivió varios años aquí, asegura que en la capital austriaca ‘’día con día encuentras un hallazgo olvidado. . . '' Algo similar me sucedió con la obra de Schiele, desde Amantes, Mujer arrodillada, el portarretrato Hombre desnudo hasta otras de sus obras en el Belvedere Museum, como: Familia, Amantes II y de manera muy particular La muerte y la doncella, en que la mujer se abraza al eremita (que es Schiele) al tiempo que amenaza con desprendérsele.

Esta última se ha interpretado como símbolo de la ruptura entre Egon y Wally Neuzil, su primera amante y musa, como una manera de poner fin a esa relación y abrirse paso entre la sociedad burguesa. Además del amor, las batallas que, aun en su corta vida, libró el pintor fueron: las del reconocimiento, el sustento y la marginación. Aunque parte de su obra guarda similitudes con la de Gustav Klimt, los efectos son diferentes, de ahí que a menudo se hable de Klimt como un pintor festivo y de Schiele como uno en que el amor, el dolor y la muerte coexisten. En efecto, Egon no podía ver el mundo con los ojos de Klimt.

¿Cómo fue la mirada de Klimt?   

Gustav Klimt fue uno de los principales exponentes del modernismo austriaco y el primer presidente de la llamada Secesión vienesa, fundada en 1897, que se propuso reinterpretar los estilos del pasado y reaccionó contra la racionalidad del comportamiento humano. Este rescate de la mente irracional y de volver la vista hacia dentro tuvo coincidencias con el psicoanálisis de Sigmund Freud: la necesidad de aceptar y entender desde los sentimientos eróticos hasta los impulsos agresivos, dirigidos a otro o a sí mismo.

Y, no obstante, los pintores (Klimt, Schiele y Oskar Kokoschka) parecieron entender, mejor que el mismo Freud, a las mujeres: desde los instintos maternales hasta la sexualidad. Este examen del otro y de sí mismo les permitió explorar y mostrar aquellos móviles inconscientes, al grado de que el expresionismo hizo las veces de escritura creativa y se convirtió en rival del psicoanálisis.

Klimt rompió con tabúes sobre la sexualidad femenina: se cree que no reprimió la sexualidad de sus modelos. En lo delicado de sus pinturas, se concentra en el placer sexual y, más allá de la desnudez femenina, sus cuadros expresan la esencia de la mujer: el placer que reciben, el placer que proveen gracias a otro, a otros, a otra, a otras. . . Están perdidas en sus fantasías, como si se encontraran en el diván de Freud. ¿Qué tan libres son estas manifestaciones? ¿Acaso las poses fueron sugeridas por el pintor o fueron elegidas para complacerlo?

A diferencia de cómo me aproximé y me planté frente a la mujer reclinada de Shiele, en el Leopold, en el Belvedere camino con tiento y pausa previo encontrarme frente a frente con El beso, de Klimt. Lo rodeo. Avanzo y retrocedo. Me detengo en los cuadros de las paredes laterales como una lenta inmersión en sus primeras obras paisajísticas, inspiradas en Van Gogh, la introducción en el periodo dorado, las referencias faraónicas y el tocado estilo Velázquez en los cuadros de Fritza Riedler, o la primera importante que el artista dedicó a una de sus mecenas, la baronesa Sonja Knips. . .

Llego al fin a la obra cumbre de este autor y confirmo lo que me dice mi acompañante: ninguna de las réplicas le hace justicia. Reposa solitaria contra una pared oscura: ilumina y pacifica, como una estrella, como una imagen religiosa, también debido a la inspiración que fueron para Klimt los mosaicos bizantinos. El hombre, ataviado con una manta dorada, cobija a la mujer arrodillada sobre una pradera florida. Lo dorado se extiende por la planicie y en la manta pueden encontrarse iconos sexuales: hay quienes hablan de triángulos en el lado masculino y ovoides en el lado femenino; del coito entre las formas circulares y las verticales; de las formas de células, con núcleo y citoplasma, relacionadas con los estudios de biología del pintor. . .

En todo caso, se respira intimidad física, quizá deseo y placidez mutuos, si bien aun se baraja en quién estaría inspirada la mujer del cuadro, Fritza o Emilia Flöge, alguna de las mujeres idealizadas o de los amoríos intermitentes de Klimt.

Bajo la mirada de Schiele, la gama de las reacciones sexuales femeninas parece más amplia. A él se la ha llamado el Kafka de la pintura y esta ansiedad sobre sí mismo la hace extensiva a lo que lo rodea: una constante perturbación de la fuerza. Sus mujeres se muestran a veces atormentadas, a veces curiosas, a veces desfachatadas, a ratos culpables, a ratos sorprendidas. . .

. . . Atinadamente miradas con los ojos de Schiele, con los ojos de Klimt.



Rose Mary Espinosa

Los poetas de nuestra vida de Rose Mary Espinosa

Mirador de Las Vistillas en Madrid
No siempre sabemos aprovechar el tiempo durante una escala larga. Así me sucede hoy en Madrid: en unas horas partiré rumbo a un reencuentro que no sé si será despedida o recomienzo. Sé, en cambio, que viajo sin esconderme, sin lastres ni culpas como me ocurrió la última vez que estuve aquí, también durante una escala.

En ese entonces cargaba con remordimientos por haberme enamorado de otra persona, aun cuando estaba en una relación, y la osadía me costó una serie de reclamos, desde: ‘’Conmigo lo tenías todo’’ hasta: ‘’Vas a terminar sola en la vida’’. Aun cuando mis sentimientos eran más firmes que nunca, procuraba vivir con discreción el nuevo romance, so pena de no hacer sentir mal a mi expareja que, de algún modo, a la fecha me responsabiliza de su mala suerte en el amor.

¿Por qué nos cuesta tanto responsabilizarnos de nuestros propios sentimientos? En la sección de Psicología de la librería busco algún título que ofrezca una respuesta rápida: de ''bote pronto'' encuentro El libro Troll, El mundo entre tus manos y La risa os hará libres.

Son tan pocas horas que me parece que no tengo muchas opciones. En la librería hay guías que proponen conocer lo básico de esta ciudad, si es necesario, en un solo día. Prefiero llamarle a mi amiga Beatriz, quién quita y pega, y queda en alcanzarme apenas salga del trabajo para pasar la tarde juntas.

En la sección cultural de La Vanguardia leo un artículo sobre el descubrimiento de la comedia Mujeres y criados, de Lope de Vega, en un manuscrito de la Biblioteca Nacional de España. El profesor Alejandro García-Reidy determinó la autoría de Lope tras una exhaustiva revisión de la métrica de dicha obra en correspondencia con otras obras del autor que datan de la misma época, es decir, entre 1612 y 1613.

Relaciones amorosas entre personas de distintos estratos sociales: de eso trata Mujeres y criados. Y estamos hablando de mujeres con iniciativa: Violante y Luciana están respectivamente enamoradas de Teodoro y Claridán, y a la vez son respectivamente pretendidas por los acomodados Don Pedro y Don Próspero, este último patrón de los muchachos.

Es una comedia urbana que confronta las relaciones por conveniencia. Ambas protagonistas son mujeres con iniciativa que se las ingenian para encontrarse con sus enamorados, burlando a su padre. Luciana calma los celos de Teodoro, quien teme que el pretendiente de su amada sea su "dueño", mientras que Violante se sirve de la ironía y el humor para responder los insistentes y exagerados galanteos de Don Pedro, su acomodado pretendiente. Al final, el amor se impone al honor y la búsqueda de la felicidad al servilismo.

Cuando termino de leer la obra (que se encuentra en línea y publicada en Gredos), llego a la cita con mi amiga y, en una tarde tranquila y fresca, vuelvo a algunos de mis espacios favoritos y me detengo en otros que no había apreciado con detenimiento.

Subimos por Serrano a la plaza de la independencia y por Alcalá a la Cibeles. Caminamos hasta Puerta del Sol, donde un grupo de veteranos marchan por la eliminación de las sentencias franquistas, seguimos a Plaza Mayor, donde decenas de mujeres vestidas con camisetas rosadas siguen la rutina de baile de un instructor. Llegamos al mercado de San Miguel, que hace unos días cumplió cinco años de haber sido renovado en una estructura conocida como Arquitectura de Hierro, a la manera de Barcelona.

Seguimos nuestra caminata. Pasamos por el famoso puente de los suicidas (Viaducto de Segovia) y Beatriz me cuenta del caso de tres adolescentes que se arrojaron juntas, antes de la instalación de las mamparas de dos metros, hace casi 16 años, para disuadir los impulsos suicidas, no siempre con éxito.

Con todo y la protección, el panorama es imponente, casi un imán. Los copiosos árboles tienen un efecto tranquilizante, a la vez que el cielo nublado ciertamente inquieta aun cuando la Basílica de San Francisco el Grande semeje un vigía. Desde un café en Vistillas miramos cómo el sol se extingue después de incendiarse entre las nubes.

Es el momento de despedirse. Regreso al punto de partida para empacar las compras del día y revisar mi correspondencia, ya que, desde que comenzó el paseo, no he tenido oportunidad de conectarme. Apenas entro a zona WiFi cae un racimo de mensajes en WhatsApp: la misma serie de recriminaciones que he recibido en los últimos años: que si nunca en la vida había padecido tanto, que no se repone, que a veces quisiera que sufriera lo mismo que él. . .

Viene a mi mente uno de los diálogos de la citada obra de Lope, cuando, celoso, Teodoro se pregunta: ‘’¿Con quién tomaré consejo que me defienda de mí cuando yo mismo me ofendo?’’. En mi caso, son las caminatas, como la inesperada de hoy en Madrid, son los hallazgos sorprendentes, es descifrar a través del arte, de la literatura, como en la citada obra de Lope, ciertos pasajes de la vida que ni la lógica ni la terapia atinan a resolver.

Esta vez Madrid ha sido la escala mejor aprovechada de mi vida. Sigo mi viaje rumbo a un episodio tan anhelado como temido y que en cualquier caso desconozco. Mis libros y mi poesía me protegen. . . Por eso recomiendo tan devotamente el recurso de mirar a través del arte y construirnos ilusiones propias, tomar lo cotidiano y embellecerlo, darle valor y significado, convertir nuestra vida en arte y poesía, ser poetas de nuestra vida.

Rose Mary Espinosa

jueves, 5 de junio de 2014

Papá, piel a piel

Siempre me gusta añadir un artículo para mis amigos hombres papás que leen los artículos y hacen muchas preguntas por la radio, los felicito porque siempre quieren estar a la vanguardia en lo que a paternidad se refiere y me encanta que busquen conocimiento.

Hemos estado platicando sobre establecer entre la madre y el neonato-bebé, contacto piel a piel desde lo antes posible, pero este sistema ofrece tantos beneficios que sería muy egoísta no quererlo compartir con papá.

¿Se han dado cuenta de que cuando entra papá a casa y toma al bebecito, éste casi inmediatamente se calma (por si estuviera llorando), se relaja y muchas veces hasta se queda profundamente dormido? Y eso que muchas veces papá lo carga con cierto temor, máxime cuando es el primer hijo y no se tiene mucha experiencia manipulando críos tan chiquitos. Pero eso no es excusa para que no lo hagan.

El que tengas a tu bebé desnudo, (quizá en pañales) recostado contra tu pecho también descubierto, le proporciona un estimulo prematuro táctil, también estimula su sistema auditivo y de movimiento, acelera el aumento de peso debido a que el chiquitín está más relajado y mamará más y mejor; además, como ya les había dicho en otras oportunidades, favorece su adaptación a la vida extrauterina.

Papá puede ayudar principalmente cuando mamá se ve un tanto limitada (debido a que fue sometida a una cesárea o por razones prácticas o médicas). Puedes aprovechar el tiempo en el que mamá se está preparando para iniciar el día, (mientras se ducha o arregla) para acoger a tu hijo en tu pecho y transmitirle calor, protección y afecto. Disfrutarás un tiempo especial mientras mamá regresa para poder acogerlo ella en su regazo.

Espero que estés acompañando a tu pareja a las consultas con el médico ginecólogo. Si no lo has hecho, me gustaría que programaran una cita juntos y le preguntaras si es posible hacer el "piel a piel" con mamá cuando el parto sea normal y si te permitirían a ti hacerlo en caso de una cesárea. Sé que hay médicos muy accesibles al bienestar de los pequeños y además comprenden que en ese momento el instinto materno es tener cerca a su bebé. Pero si fuera necesaria la cesárea, que te permitieran a ti, papá, hacerlo. Así que anímense a preguntar.

Me alegraría mucho que ustedes, papás, se animaran a tener el contacto piel a piel con su bebé, en definitiva es una experiencia beneficiosa para quienes lo puedan practicar, esperaría que muchos papás se animen y muchos bebés se vean favorecidos con este sistema que provee efectos positivos.

Cuéntenme sus experiencias, hagan preguntas y generemos conocimiento entre todos.

Ileana Páez-Hanser
Psicología Perinatal
Licda. Psicóloga Clínica
Especialización en Psicología Perinatal

martes, 3 de junio de 2014

La pérdida de un bebé (parte 3)

Hasta ahora hemos visto que cuando se pierde un embarazo, pueden darse varios momentos: el momento de choque y el momento de nostalgia. Ahora veremos nuevas circunstancias por las que también se atraviesa en estos momentos:

Momento de Desorganización:

Por lo general, después de vivir esta experiencia tan fuerte, la pareja no tiene deseos de salir, se retiran de los amigos y la familia, pueden desarrollar síntomas de depresión como tristeza, apatía, disminución del apetito y de la autoestima, tienen dificultad para realizar rutinas diarias, la culpabilidad puede acrecentarse debido a la incapacidad de salir adelante, los síntomas fisiológicos también se acentúan y la persona puede llegar a ocultar su depresión tras enfermedades físicas.

Se vuelve imprescindible el apoyo psicosocial, familiar y espiritual para poder superar la pérdida, este momento puede durar un poco más allá del año así que habrán fechas que causen dolor como el aniversario del suceso, las vacaciones, fechas significativas como el día de la madre o del padre que incluso pueden causar tristeza durante muchos años después.

La recomendación siempre es a buscar ayuda; hablar y ponerle palabras a las emociones es liberador y sanador. Conforme van pasando los días y semanas, va volviendo la calma y este momento se debe aprovechar para hacer un recuento de lo que se ha aprendido, lo que se ha superado y también para volver a situar metas a corto, mediano y largo plazo. Éste es el momento del reajuste.

Momento de reajuste:

Inicia cuando la pareja empieza a aceptar la muerte de su hijo, gradualmente van teniendo un reajuste emocional. Éste proceso se caracteriza por que las personas poco a poco empiezan a llevar una vida normal, vuelven a las rutinas previas y empiezan a hacer planes para el futuro. No quiero que piensen que ya no recordarán al bebé que esperaban, el amor que sentían por ese bebé no ha cambiado pero los padres han aprendido a incorporar en sus vidas la pérdida y cómo les digo, poco a poco van recuperando el deseo de salir adelante, dejar atrás el dolor.

Todos estos procesos no se pueden alterar, es importante de vivir cada uno y cada persona tiene su propio tiempo para salir de ellos, tampoco se pueden acelerar, la duración varía según la personalidad de cada quien pero se puede hablar de entre 18 a 36 meses. Les recuerdo que el apoyo que reciban las parejas por parte de los amigos y la familia es importante y la asistencia de un equipo de salud servirá para que el proceso sea menos duro. Un profesional en psicología es muchas veces necesario.

Es imprescindible un apoyo psicosocial y espiritual para superar una muerte perinatal, muchos médicos o asistentes de salud e incluso muchas personas alrededor de la pareja, no creen que así sea puesto que no tuvieron "relación" con el feto que murió, pero como decía en uno de los artículos anteriores, la pareja ha formado en vista de este embarazo esperanzas y anhelos que se pierden y por supuesto que han empezado a sentir amor por el bebé. Es crucial un apoyo constante de compasión y empatía para superarlo.

Ileana Páez-Hanser
Psicología Perinatal
Licda. Psicóloga Clínica
Especialización en Psicología Perinatal

La pérdida de un bebé (parte 2)

Hay temas de los que no nos gusta hablar porque resulta muy doloroso o da mucha pena, pero es importante que sepamos que mientras guardamos más las cosas, más difíciles son de resolver y luego las repercusiones inundan muchos ámbitos de la vida diaria haciendo estorbo para tener mejor calidad de relaciones interpersonales, pudiendo llegar a dañar incluso nuestra autoestima. Por eso, en Psicoperinatología vemos la importancia de ventilar temas como la pérdida de un bebé que no ha nacido, de un feto. Un tema que incluso no se le ha dado el valor que tiene por creencias erróneas. En estos artículos trataré de abordar de forma breve, las fases o como les llamo personalmente, "momentos" que suelen vivirse luego de una pérdida de este tipo.

Estos momentos son:

  • Momento de Choque
  • Momento de Nostalgia
  • Momento de la Desorganización Emocional.
  • Momento del Reajuste
  • Momento de Superación.
Si tú o alguien cercano ha tenido una pérdida y se identifica en alguno de estos momentos, es importante que sepas en primer lugar que se puede salir adelante, que si se considera necesario platicar con alguien sobre lo que se está sintiendo es bueno que se busque con quien hacerlo y mejor si es un profesional de la salud mental. Recuerda que cada proceso es diferente y aunque puedas ubicarte en una de las etapas o momentos, necesitas que tu proceso continúe para elaborarlo de la mejor manera.

Cuando una chica viene a la clínica para resolver sus temores en cuanto al embarazo, es muy común escuchar que también tienen temor de perder al bebé, algunas veces ya les ha sucedido y por eso es que se deciden a platicar del asunto.

Primero entendamos que la pérdida de un embarazo es la muerte de un nonato en cualquier momento de la gestación. Muchos suceden tan temprano, que la madre ni siquiera sabía que estaba embarazada, algunos embarazos ya confirmados se pierden durante el primer o segundo trimestre de la gestación y son muy pocos los embarazos que se pierden después de la semana 16. Pero no hay que descartar la posibilidad.

Afortunadamente, la mayoría de las pérdidas de embarazos son eventos aislados, lo importante a recordar es que las familias, parejas o la madre que ha recibido apoyo emocional y se ha sentido compadecida, suelen manejar mucho mejor el tiempo de duelo y estará más preparada para ir asimilando el suceso, si además han recibido acompañamiento psicológico, estarán más capacitados para incluso enfrentar otros temas como la ira y la culpa que genera una situación así.

El trato del personal de salud y una asistencia psicológica inmediata permite que la pareja pueda llorar, despedirse de su bebé y no perder la serenidad; la oportunidad de decir adiós por última vez es muy importante para una mejor recuperación en todo sentido, emocional, psíquico y físico.

No hay una frase adecuada que pueda consolar el dolor de los padres en ese momento que se siente como una crisis vital; muchas veces es más efectivo el contacto físico, un abrazo, una caricia, incluso el silencio es mejor compañía, pero nunca la indiferencia ni la frialdad; pensar que "pronto va a pasar" es atentar precisamente a lo que se espera, dejar a los padres y familiares sin respuestas, provoca un impacto mucho más fuerte en relación al tiempo de recuperación del duelo.

Cómo siempre les dejo una pequeña recomendación: Busquen ayuda profesional, en las consultas privadas suelen darse herramientas para sobrellevar el duelo. Y al valioso lector de personal de salud, les encomiendo la difícil pero inestimable labor de ser solidarios y afectuosos con las familias que atraviesan esta situación.

Ileana Páez-Hanser
Psicología Perinatal
Licda. Psicóloga Clínica
Especialización en Psicología Perinatal

lunes, 2 de junio de 2014

Cómo conversar con sus hijos sobre las noticias

Aunque las noticias extraídas de la televisión, la radio o de Internet muchas veces son una experiencia educativa positiva para los niños, pueden surgir problemas cuando las imágenes que se presentan son violentas o las historias tocan temas perturbadores.

El tiroteo en Connecticut, en el cual murieron niños y personal de la escuela de Sandy Hook Elementary School, seguramente preocupará a los niños dado que pensarán que algo similar podría pasarles a ellos o sus seres queridos. Este acontecimiento también puede hacer que teman ciertos aspectos de la vida diaria, como ir a la escuela, que nunca antes habían temido.

Las noticias de tiroteos, desastres naturales y secuestros de niños, pueden enseñarles a los jóvenes a ver el mundo como un lugar confuso, amenazante y poco amigable.

¿Cómo puede abordar estas historias e imágenes perturbadoras? Conversar con los niños sobre lo que ven o escuchan puede ayudarlos a situar la información aterradora en un contexto razonable.

Cómo perciben las noticias los niños

A diferencia de las películas o los programas de entretenimiento, las noticias son reales. No obstante, según la edad o el nivel de madurez de un niño, es posible que él o ella aún no entiendan las distinciones entre realidad y fantasía. Sin embargo, al momento en que los niños cumplen 7 u 8, todo lo que ven en TV puede parecer real. Para algunos niños, lo vívido de una noticia sensacionalista puede internalizarse y transformarse en algo que podría sucederles. Un niño que ve una noticia sobre una bomba en un autobús o en un metro podría preocuparse, "¿Podría ser el siguiente? ¿Esto me podría pasar a mí?".

Las catástrofes naturales o las historias de otros tipos de desastres pueden personalizarse de la misma manera. Un niño en Massachusetts que ve una casa que es tragada por las inundaciones de un huracán en Luisiana podría pasar una noche sin dormir preocupándose por si su casa estará BIEN durante un temporal. Un niño en Chicago que ve noticias sobre un ataque en el metro de Londres podría asustarse sobre el uso del transporte público en la ciudad. La televisión tiene el efecto de encoger el mundo y traerlo a nuestras propias salas de estar.

Al concentrarse en historias violentas, las noticias de la televisión también pueden promover un síndrome de "mundo malo" y darles a los niños una perspectiva imprecisa de lo que son el mundo y la sociedad realmente.

Cómo conversar sobre las noticias

Para aliviar los miedos de los niños sobre las noticias, los padres deben prepararse para dar lo que los psicólogos denominan "información tranquila, inequívoca pero limitada". Esto significa ofrecer la verdad pero sólo la verdad que un niño debe saber. La clave es ser tan veraz y, a la vez, lo menos explícito como sea posible. No hay necesidad de entrar en más detalles de los que a su hijo le interesan.

Aunque es verdad que algunas cosas, como una catástrofe natural, no se pueden controlar, los padres deben brindar espacio para que los niños compartan sus miedos. Incentívelos a hablar abiertamente sobre lo que los asusta.

Los niños mayores son menos propensos a aceptar una explicación literal. Su escepticismo incipiente sobre las noticias y cómo se producen y venden podría ocultar ansiedades que tengan sobre las historias que cuentan. Si los niños más grandes se sienten molestos ante una noticia, ayúdelos a afrontar esos miedos. La disposición de un adulto para escuchar envía un mensaje poderoso.

También puede incentivar a los adolescentes a que consideren la razón de por qué una historia aterradora o perturbadora estuvo al aire: ¿fue para aumentar el nivel de audiencia del programa por su valor sensacionalista o porque verdaderamente tenía interés periodístico? De esta forma, una historia temible puede volverse un debate valioso sobre el rol y la misión de las noticias.

Sugerencias para los padres
Si se presta atención a los hábitos de noticias televisivas de los niños, podría controlar prácticamente el contenido de lo que escuchan y ven. Otras sugerencias:
  • Tenga en cuenta que las noticias no tienen que imponerse mediante imágenes perturbadoras. Los programas televisivos públicos, los periódicos o las revistas de noticias específicamente diseñados para los niños pueden ser formas menos sensacionalistas, y menos desconcertantes, de acercar la información a los niños.
  • Debata sucesos actuales con su hijo habitualmente. Es importante ayudar a que los niños reflexionen bien sobre las noticias que escuchan. Haga preguntas: ¿qué piensas sobre estos sucesos? ¿Cómo crees que suceden estas cosas? Estas preguntas también pueden fomentar la conversación sobre temas que no sean noticias.
  • Ponga las noticias en el contexto correcto. Mostrar que determinados sucesos están aislados o explicar cómo un suceso se relaciona con otro ayuda a los niños a entender mejor lo que escuchan. Amplíe el debate de una noticia perturbadora en una conversación mayor: utilice la historia de una catástrofe natural como una oportunidad para hablar sobre filantropía, cooperación y la capacidad de las personas de afrontar una dificultad devastadora.
  • Mire las noticias con los niños para filtrar historias inadecuadas o aterradoras.
  • Anticipe cuando orientación será necesaria y evite espectáculos que no sean adecuados para la edad o el nivel de desarrollo de su hijo.
  • Si no está cómodo con el contenido de las noticias o si es inadecuado para la edad de su hijo, apáguelo.
  • Hable de lo que puede hacer para ayudar. Después de un acontecimiento como el tiroteo de Connecticut, los niños pueden lograr un sentido de control y sentirse más seguros si usted los ayuda a encontrar una manera de ayudar a las personas afectadas por la tragedia o a mostrar el respeto a las personas fallecidas.
Fuente: Kids Health