miércoles, 18 de diciembre de 2013

Seis consejos para ser una súper mamá, parte 1

La clave para conquistar a tus hijos está en combinar equilibradamente tu paciencia con tus ganas de reír, pero sin perder la autoridad. Busca momentos para estar con tus hijos.

Paciencia, ganas de reír y jugar, pero sin perder la autoridad. Esa es la combinación perfecta de cualidades que debes alcanzar para convertirte en una mamá muy divertida.

“Mi hijo de 14 años siempre les dice a sus amigos que soy \\'una mamá cool\\'. Sin embargo, a veces me pregunto si realmente lo soy”, comenta Mónica, de 40 años.

La maternidad, para muchas mujeres, es una de las etapas más importantes de la vida. Aunque hay momentos en los que el ser mamá puede convertirse en algo estresante, principalmente para las primerizas, pues suelen pensar —tal vez por inseguridad— que no son buenas madres. Sin embargo, no existe una receta perfecta que te diga cómo desempeñarte como madre.

Por eso, antes de emitir algún criterio sobre tu desenvolvimiento como mamá o hacer un juicio de valor, mejor pregúntales a los directos interesados, es decir a tus hijos.

El conocer qué es lo que ellos opinan de ti te ayudará a saber cuán buena mamá eres. Ahora, el ser una buena madre no siempre quiere decir que seas buena onda. Y si eso es lo que quieres ser, Mía te regala unos consejos que te harán mucho más divertida la tarea.

1 INVOLÚCRATE

EN SUS JUEGOS
Una mamá buena onda se involucra en las cosas de sus hijos, desde que son pequeños. Para ellos, es importante tener cerca a su mamá, pero qué mejor si ella se saca tiempo para jugar con ellos. “No es agradable una mamá que está todo el tiempo ocupada”, dice la sicóloga Susana Sáinz. Es importante brindarle tiempo, no basta que lo veas jugar fútbol desde la tribuna o veas cómo juega con sus amigos o amigas. Es mejor que tú busques un tiempo para divertirte con tus hijos.

Fuente:
Todo para padres e hijos

¿Qué son los vicios?

Hay diferentes maneras de definir qué es el vicio.

En primer lugar, la palabra vicio, proviene del latín “vitium”,que lo define como una "excesiva afición a algo, especialmente si es perjudicial", como una "mala costumbre, el hábito de obrar mal" y como una "cosa a la que es fácil aficionarse", por supuesto, el significado social que se le ha dado a la palabra vicio se ha ido ampliando para incluir muchas otras acepciones; como la mala condi­ción del alma de las personas para inclinarse a abusar de determinadas cosas; es el acto de ejecutar una acción, frecuentemente o en demasía, es la afición por determinadas costumbres, que incitan a excederse en el goce de los deleites, es el gusto o la manía, que provoca excesivo apego hacia las cosas que perjudican a la salud, es la libertad ilimitada, para adoptar las tendenciosas o malas costumbres, es la tendencia que incita a procurar cualquier perjuicio en contra de nuestros semejantes, es el acto de consumar alguna acción con perversidad; es el estado inconsciente que convierte al hombre en un ente despreciable; es también la degeneración producida por el uso excesivo del alcohol, de los juegos de azar y de las drogas enervantes. Cuando hablamos de vicios generalmente pensamos en el tabaco, las drogas, el alcohol. PERO hay otros vicios como mencione antes espirituales, aficiones negativas, pero que decimos de aquellas personas que acumulan cosas, se ahogan en artículos, enseres, ropas y no le dan salida por un apego enfermizo porque acumulando van llenando en sus vidas vacios actuales, o traumas de pequeños que se va convirtiendo en Vicios que en muchas en ocasiones pueden poner en riesgos hasta nuestra vida, los vicios son sinónimos de enfermedad que debemos atacar rápidamente para que no se conviertan en demonios para nosotros mismos, el apego casi siempre nos llevan a ser acumuladores, y esa patología es nocivo para nosotros podemos perder a hasta nuestros familiares, amigos y parejas, tenemos que dar espacios para cosas nuevas, aceptar que las cosas pueden reemplazarse por otras que sean necesaria para nuestro vivir. No debemos cometer el error de vivir en pasado acumulando rencor, odios y crear el vicio de la venganza, ni comprar convulsivamente y hasta la gula es un vicio, así que desde hoy desecha todo vicio y no te conviertas en acumulador profesional.

ELANGELUS. MONICA ZERPA