jueves, 5 de septiembre de 2013

El estrés y 7 claves para mitigarlo


En principio, cuando nuestro cuerpo reacciona ante una situación con estrés, su fin es protegernos.  Pero cuando se encuentra constantemente en alerta debido al estrés, nuestra salud puede pagar un alto precio.

Si te encuentras ante una  amenaza, por ejemplo: – Un perro grande te ladra durante tu paseo por la mañana, – el hipotálamo, una pequeña región en la base del cerebro, pone en marcha un sistema de alarma en tu cuerpo. A través de una combinación de señales nerviosas y hormonales, este sistema le indica a las glándulas suprarrenales, situadas encima de los riñones, liberar una oleada de hormonas, incluyendo la adrenalina y el cortisol.
La adrenalina aumenta tu ritmo cardíaco, eleva la presión arterial y aumenta el suministro de energía. El cortisol, la hormona del estrés primario, aumenta los azúcares (glucosa) en la sangre, alertando mejor a tu cerebro y aumenta la disponibilidad de sustancias para la reparación de los tejidos; éste sistema complejo de alarma natural también se comunica con las regiones del cerebro que controlan el ánimo, la motivación y el miedo.
Una vez que haya pasado la amenaza el cuerpo humano se auto-regula, disminuyen los niveles de hormonas y se vuelve a la normalidad con objeto de reanudar las actividades ordinarias.
Ante las tareas de la vida diaria, tales como enfrentar una gran carga de trabajo, el pago de deudas a fin de mes, el procurar el cuidado constante de la familia, o simplemente el desgaste en las horas pico para trasladarse, son situaciones que se pueden considerar como amenazas y el cuerpo humano reacciona de manera natural ante ellas para protegerse.
La activación a largo plazo del sistema de respuesta al estrés – y la posterior exposición excesiva al cortisol y otras hormonas del estrés – pueden afectar casi todos los procesos de tu cuerpo. Esto lo pone en mayor riesgo reflejándose en numerosos problemas de salud, incluyendo:
  • Enfermedad del corazón
  • Problemas del sueño
  • Problemas digestivos
  • Depresión
  • Obesidad
  • Deterioro de la memoria
  • Enfermedades de la piel
Es por eso que es tan importante aprender maneras saludables de lidiar con los factores de estrés en tu vida, por lo que debemos de ser capaces de controlar el estrés y no de que éste controle nuestra vida.
Se recomiendan realizar las siguientes 7 actividades para el buen manejo del estrés:
  • Tener una dieta saludable.
  •  Hacer ejercicio regularmente.
  •  Dormir lo suficiente
  • Practicar técnicas de relajación, escuchar música, etc.
  • Fomentar amistades sanas
  • Tener sentido del humor
  • Buscar ayuda profesional cuando sea necesario
La recompensa de manejar el estrés es el lograr vivir en paz de manera saludable.
Fuente: Mejor en salud 

miércoles, 4 de septiembre de 2013

La elección de nuestros pensamientos, somos nosotros

Tenemos que tener en cuenta que nosotros somos los que elegimos qué pensamientos vamos a retener o expulsar, qué pensamientos escogeremos o qué pensamientos descartaremos.

Así, vamos construyendo nuestra propia caja fuerte de pensamientos, nuestro propio repertorio, otorgando mayor o menor importancia a cada uno de ellos, proporcionando a algunos cimientos más fuertes, a otros más débiles, sosteniéndolos, alimentándolos, manteniéndolos como nuestros compañeros durante el tiempo que elijamos.

Durante este proceso creamos cada uno de nosotros, nuestro propio filtro de la realidad, aceptando aquello más acorde a nuestros esquemas y descartando aquello que no se relaciona tanto. Filtramos la realidad acorde a nuestros pensamientos, valores, sentimientos, emociones y necesidades.

¿Cuál es la mejor creencia que podemos tener?

Aquella que nos confirme que nosotros tenemos el mando de nuestras decisiones, y que a través de ellas podemos modificar cualquier pensamiento o estado de nuestra mente. Esto nos permite flexibilidad, saber que aunque tengamos una serie de tendencias más o menos estables, también tenemos la capacidad de elegir, de no ser rígidos, y poder adoptar aquello que nos produzca más beneficios y bienestar.

No importa que un día tenga tonos oscuros, tú tienes la suficiente capacidad como para teñir ese día de colores más claros, tú puedes elegir que pensamiento puede invadirte en ese momento y qué pensamiento puedes desechar.

Por lo tanto para un lograr un cambio, tenemos que comenzar creyendo en ese cambio, sobre todo, en la fuerza, motivación, y poder de nuestra decisión, y en último término, de nuestro pensamiento.

Tenemos que creer en nosotros, en nuestra capacidad potencial de ser y actuar, y tener en cuenta que el pensamiento puede dar sentido a nuestras vidas, pero también tiene la capacidad de arruinárnosla. Así pues, elijamos bien cuál es nuestro repertorio de pensamientos, e incluyamos aquel que nos permita la posibilidad de cambio, en nosotros finalmente se encuentra el mando de nuestras decisiones.

Fuente: Mejor con salud 

martes, 3 de septiembre de 2013

Fibromialgia, ¿cómo vivir con ella?


Cada vez hay más personas afectadas por esta enfermedad y, pese a que algunas tienen una mejor calidad de vida con los medicamentos que se toman, otras no pueden aguantar el fuerte dolor que conlleva sus síntomas. Además, los pacientes no son los únicos afectados por esta enfermedad, ya que esta involucra a sus familiares, pues es mucho lo que cambia en una persona que la padece.

Orígenes de la Fibromialgia

La fibromialgia es un trastorno en el que las personas que la sufren padecen de mucho dolor en las articulaciones y los músculos. Además, la fibromialgia también va asociada a padecer muchos dolores de cabeza, cansancio (fatiga crónica) y dificultad para conciliar el sueño.

Tratamiento Fibromialgia

La fibromialgia requiere de tratamiento con medicamentos, pero también necesita de una buena alimentación, ejercicio suave y mucho descanso. Por ello, las personas que sufren esta enfermedad deben poner todo su empeño en cuidarse y, las personas que viven con ellas, deberán entender las necesidades de la persona afectada.
Dolor y entendimiento

La fibromialgia es una enfermedad que no se ve, pero que sí la sienten las personas que la sufren. Debemos pensar que algunas de ellas incluso tienen problemas con la ropa. Muchas mujeres no pueden dormir con mantas ni con sábanas pues la sensación de que estas les pesan y el dolor que les provocan en las piernas, brazos o espaldas es suficientemente fuerte como para evitar el uso de ellas. Por otro lado, complementos como el sujetador, son otras causas de dolor para estas personas.

El hecho de sentir siempre dolores, es algo que acaba con la personalidad de estas personas. Según el tipo de afectadas por esta enfermedad, pueden volverse más agresivas verbalmente y, además, pierden mucho la paciencia con las cosas. Las personas a las que quieren no las pueden ni tocar, porque el contacto de estas les duele; suelen siempre estar cansadas, pues la enfermedad se asocia muchas veces a la fatiga crónica y son más vulnerables en todos los aspectos, lo que les lleva a sufrir constantes depresiones y ataques de ansiedad.

Por ello, cada vez hay más grupos de apoyo a los familiares de las personas afectadas con fibromialgia, pues es bien cierto que sufrir dolor a diario y de manera constante, hace que las personas cambien y el humor les baje. La medicación que se ofrece a estas personas, basada en antidepresivos y analgésicos para el dolor, entre otros muchos, hace que algunas de ellas puedan recuperar un poco la estabilidad y llevar una vida más o menos normal.

Sin embargo, el cambio en el carácter de la persona es algo que no se recupera y las personas que conviven con ella deben aprender qué es lo que pueden hacer y qué es lo que no pueden hacer.

Es importante que, si somos familiares directos de una persona con fibromialgia, entendamos que los cambios de humor son constantes y que se queje cuando la toquemos también es normal. Debemos tener en cuenta que no es que la persona quiera ser así, si no que no tiene más remedio. Por ello, hablar con calma a estas personas y entenderlas es uno de los pasos obligatorios para cualquier persona que quiera hacer sentir mejor a una persona con fibromialgia.

No debemos tomarnos a mal las cosas, si no que debemos pensar que esta persona tiene un problema, aunque no lo veamos y que es del todo necesario recurrir a los expertos para que nos asesoren de cómo se debe tratar una persona que padece de esta enfermedad para que la familia pueda seguir con el amor, cariño y armonía que ha tenido siempre.

Mucho ánimos a todos aquello que padecen esta enfermedad y a sus familiares.

Fuente: Mejor con salud