domingo, 5 de mayo de 2013

En memoria a los tiroteos en las escuelas

Mamá... Johnny trajo una pistola a la escuela hoy, le dijo a sus amigos que era cool. Y cuando haló el gatillo, hizo un gran estruendo.

Mamá... yo fui una chica buena, siempre hice lo que se me pedía. Fui a la escuela, siempre tuve excelentes calificaciones. Hasta obtuve el primer lugar! pero mamita querida, cuando fui a la escuela este día, tu aún estabas dormida y no me despedí.
Discúlpame mamá, me tenía que ir para no perder el bus, así no tendría que despertarte para que me llevaras, y tú descansarías, pues trabajas mucho en la casa haciéndolo todo para mis hermanitos, mi padre y yo.
Nunca te lo dije, pero yo siempre te lo agradecí mamá. Sé que sufrirás mucho por no poderme abrazarme de nuevo, ni verme sentada a la mesa contigo, y cuando mis hermanitos se gradúen yo sé que vas a pensar en mí, en los sueños que nunca pudieron realizarse; mamá... no llores por favor. Cuando Johnny disparó, me hirió a mi y a otra persona. Un amigo mío que quizás tampoco pueda realizar sus sueños. Todo porque Johnny consiguió la pistola por medio de su hermano mayor.
Mamá, por favor dile a papá que lo quiero mucho, y que yo siempre soñé con el día en que él me llevara hasta el altar y me entregara al que habría de ser mi esposo.
Sé que iba a sentirse muy contento y orgulloso de mí, así como yo siempre lo estuve de él.....y de ti mamá. Y por favor dile a Chris mi novio; que lo amé mucho, y que me perdone por cancelar la cita de esta noche, que yo quería compartir con él el resto de mi vida, y realizar juntos nuestros sueños. Y dile a mi abuelita que la estaré esperando en el cielo. Dile a todos mis amigos, que siempre fueron muy especiales para mí, que siempre fueron los mejores, a mis hermanitos diles....que nunca tomen un arma en la mano... nadie tiene derecho a destruir una vida, así como me han destruido la mía mamá... y con ella todas mis ilusiones. Mamá, no soy la primera, no soy mejor que los demás, pero quería ser alguien en la vida de quien tú siempre te sintieras orgullosa, estar contigo ahí cuando estuvieras viejita para ayudarte y cuidarte con el mismo esmero que tu nos cuidas a nosotros.
Dile a mis maestros, que no iré mas a la escuela....pero que les agradezco por todo lo que aprendí con ellos.... Mamá, por que tuvo que pasarme a mi? Nadie lo merece. Adviértele a los demás para que no vuelva a ocurrir. Me fui sin tu beso.... sin tu bendición de todos los días.... y pensar que hoy... cuando despiertes, quizás sea por la policía tocándote a la puerta para darte tan terrible noticia. ¿Llegarás a tiempo al hospital mamita?

Siento que me muero, tengo frío, cada vez las voces se oyen más y más lejos.... Dile a los doctores que yo sé que hicieron lo que pudieron. Creo que hasta vi a un doctor evitando el llorar. De seguro pensaba en sus hijos en ese momento.
Ay mamá!, me muero lentamente con una bala en mi pecho. Pero por favor mamá recuerda que estaré en el cielo con Dios. No te preocupes por mí, más bien, ora por Johnny, y no le guardes rencor.
Su vida también se ha destruido. Y sus padres también sufrirán mucho, y llorarán...y lo extrañarán. Pasará muchos años en la cárcel por el delito cometido. Ojalá esto le sirva de experiencia, ojalá y algún día se arrepienta. Sé que no fue su intención herirme, siempre fuimos muy buenos amigos, crecimos juntos, pero la bala me alcanzó a mi.
Porqué mamá? Porqué yo? Corrí lo mas rápido que pude cuando escuche el estruendo. No me di cuenta de que el balazo me había impactado....hasta que caí al suelo sangrando, pensando que ya nunca mas te volvería a ver. Te quiero tanto mami!!! Qué pena que ya nunca voy a regresar a casa. Me hubiera gustado ir a la universidad... probar cosas nuevas. Ya no voy a poder ir con mi papá a visitar el nuevo zoológico. Ya nunca podré casarme ni tener hijos. Quería ser una actriz... ahora sólo seré un nombre más en una lápida fría. Mamá, yo quería vivir.... pero me tengo que ir. Se esta haciendo tarde.

Yo sé que vienes en camino hacia acá... cuánta angustia debe haber en tu corazón en este momento. Ojalá pudiera esperarte, para decirte una vez más.... para decirte... Que es ese ruido? Porqué todos los médicos hablan agitados? Se va? Se nos va? Quien se va? Ah....soy yo...lo siento mamá...no pude esperarte Mama... lo que quería... decirte es ...que te quiero mucho!!!! Mucho... mamá...!!!!

Desconozco a su autor

viernes, 3 de mayo de 2013

Prevención y control del acoso escolar

¿Se puede proteger a tu hijo para que no se convierta en un acosador ni en un acosado? Pues, claro que sí. Por lo menos, existen algunas pautas que pueden ayudar tanto a la familia como a los educadores y a la sociedad de un modo general, a prevenir este fenómeno. Luchar contra el bullying es una responsabilidad de todos. Cada parte implicada debe cumplir su papel.

El acoso escolar y la familia

Educar es una tarea muy difícil ya que los padres ni las madres son expertos en pedagogía o han nacido ya preparados para educar a sus hijos. Pero la familia se construye y su estado es considerado esencial para la socialización de los niños, a través de la transmisión de valores, normas o comportamientos. La familia es la que tiene que establecer lo que es inaceptable y lo que es aceptable, en casa y en las relaciones sociales. Según los expertos en acoso escolar, la ausencia de reglas, la falta de supervisión y de control razonables de la conducta de los hijos fuera del colegio, de lo que hacen y con quién van, una disciplina demasiado dura, la falta de comunicación y la presencia de tensiones y de peleas en la familia, pueden llevar a los hijos a la adquisición de conductas agresivas.

Recursos familiares contra el acoso


Existen cursos y reuniones en las escuelas de padres y madres que pueden orientar a los progenitores acerca de lo que se puede hacer para mantener alejados a sus hijos del bullying. Se basan, normalmente, en reglas básicas como:

1. Preocuparse por los hijos, hablando con ellos y creando un canal de diálogo. Evitar los monólogos. Se aprende y se conoce mejor a los hijos, escuchándoles.
2. Estar pendiente de los posibles síntomas como nerviosismo, falta de apetito, insomnio, bajo rendimiento escolar o fobia escolar.
3. Controlar y supervisar las conductas de los hijos, observando qué hacen, a dónde van, con quién juegan, cuáles son sus intereses y proyectos.
4. Determinar los límites y las normas. Exigir el cumplimiento de las elementales.
5. Educar para controlar las emociones, para comportarse con los demás y para convivir con otros.
6. Observar los comportamientos, estados de ánimo y cambios en los hábitos de los niños.
El papel de la escuela en el acoso

El tipo de disciplina que exista en las aulas y en el centro escolar es de fundamental importancia en la construcción de una buena conducta. La constante supervisión de la conducta de los niños en las aulas y en el patio, así como en el comedor, cuenta a la hora de detectar si está o no ocurriendo algún caso de acoso escolar. Profesores y cuidadores deben estar presentes y pendientes, siempre.

Actuación de la escuela frente al acoso escolar

En un principio, no cerrar los ojos a la realidad. Establecer reglas para evitar el bullying, mantener un buzón de sugerencias y de quejas siempre abierto, tratar el tema a través de cursos, conferencias o tutorías, poner a cuidadores o vigilantes en el comedor, en el recreo, y en otras zonas de riesgo, introducir y mantener asignaturas de educación en valores, e intervenir de una forma rápida, directa y contundente en el caso de haya alguna sospecha de acoso escolar. En complicidad con el centro escolar, los profesores deben colaborar en la identificación de algún caso, o simplemente estableciendo con sus alumnos unas normas de no agresión.

Las instituciones y los medios de comunicación

Crear y mantener un teléfono público para los niños es una forma de abrir una puerta a sus posibles conflictos. Las campañas anuales de sensibilización también pueden funcionar para prevenir el acoso escolar. En cuanto a los medios de comunicación, sería interesante y muy viable que controlasen más los contenidos que emiten o publican. La sociedad en general debe prevenir y atajar posibles brotes de acoso. Es necesario estar atento y no dejar pasar nada o pensar que todo es normal o se trata de una broma. Cuando un niño se burla, amenaza o pega a otro niño, se debe intervenir para que eso no se repita. Cuando en el patio del colegio alguien se burla del aspecto de otra persona, hay que reprenderle.

Fuente: Guía Infantil 

jueves, 2 de mayo de 2013

Cómo hablar de emociones y de sentimientos con los niños

No solo debemos enseñar a los niños a razonar como también a entender sus sentimientos y emociones. No siempre nos resulta fácil hablar con nuestros hijos de emociones y de sentimientos, pero sería enormemente beneficioso para ellos disponer de la oportunidad y de las palabras necesarias para comunicarnos sus más íntimos pensamientos, sus sensaciones, sus disgustos, su arrepentimiento, su cariño,... en definitiva, abrirnos su interior.

Hablar de sentimientos con los hijos

La comunicación entre padres e hijos es fundamental para que exista armonía en el hogar y se establezcan entre nosotros unos lazos afectivos perdurables. Hablar con ellos sobre lo que han hecho, lo que han aprendido, o con quién han estado es una excelente manera de conocerlos..., pero un paso más es que nos cuenten cómo se han sentido, si han estado alegres, tristes o enfadados..., para mí esto es el inicio de una confianza indestructible.

Los lazos de unión son más poderosos cuanto mayor es la capacidad de hablar de aspectos íntimos e individuales. Mostrar nuestras debilidades, nuestros temores o nuestra alegría no nos hace vulnerables dentro de los vínculos familiares, si no que nos hacen más humanos y naturales.

Yo reconozco que, a veces, me cuesta hablar de cómo me siento, cuáles son mis sentimientos..., por ejemplo, en muchas ocasiones, miro a mis hijos y quiero besarles, quiero decirles que les quiero, pero no lo hago. Me callo y, sólo en excepcionales ocasiones, les estrujo y les dijo las palabras mágicas "te quiero". Unas veces por vergüenza y otras por prisas, el caso es que pasamos por la vida haciéndonos los duros, soportando nuestras tensiones y evitando dar rienda suelta a nuestras emociones.

Lo mejor sería que nuestros hijos, cuando quieran reír rían, cuando quieran llorar, lloren, cuando sientan una injusticia, pidan justicia, y cuando sientan arrepentimiento ante un error, pidan perdón. Para ello, nosotros volvemos a ser sus modelos, somos los más indicados para proporcionarles las herramientas necesarias. Muchos padres y madres sufren mucho ante la falta de expresión amorosa y sincera de sus hijos a los que tanto han dado.

Sus relaciones se convierten en una distante expresión cordial de convivencia, faltas de emotividad y gratitud. Lo mejor es empezar cuanto antes a expresar nuestros sentimientos, pero nunca es tarde para "mover pieza" y decirles a los hijos que les queremos (ellos seguramente lo saben, pero todos necesitamos escucharlo alguna vez). Hablar de nuestros sentimientos y enseñar a nuestros hijos hablar sobre ellos, sin duda, nos hará vivir más felices. ¿Acaso no nos alegra el día, un beso y un "te quiero" sincero de nuestro hijo?

Mirna Santos. 
Guía Infantil