viernes, 14 de febrero de 2014

Convierte tus decisiones en realidad

“¡Dejar de fumar es fácil! Dice un amigo. ” Yo lo he hecho cientos de veces”

Las decisiones eran para él sólo un divertido ritual de año nuevo. No esperaba realmente tener resultados

Yo sí y también las personas a quienes ayudo. Cada Enero ellos deciden dejar de fumar, perder peso, ponerse en forma, ser amables, mejorar en los negocios, hacer más dinero y muchas otras cosas. Y la mayoría tienen éxito.

Pero, cada año, muchos se quejan de que algo altera sus planes. Ignoran su decisión y se devuelven hacia sus cómodos pero poco efectivos hábitos. En lugar de seguir persiguiendo los resultados y la recompensa que quieren, crean frustración, culpa y depresión.

¿Te suena familiar?

Si es así, no seas duro contigo mismo; esto conlleva culpa y depresión.

En lugar de ello, existen siete prácticas para convertir en resultados tus decisiones. Ellas pueden ayudarte a crear y mantener casi cualquier resultado que realmente importe en tu vida.

SIETE PRÁCTICAS PARA CREAR CASI CUALQUIER COSA

1. Crea una clara, comprometida visión.
Enfócate en lo que quieres crear, no te enfoques en aquello de lo que te quieres deshacer.
“Perder peso”, sería “un cuerpo bien tonificado”

“Dejar de fumar” sería “los pulmones limpios y saludables de un no-fumador”
Está bien comenzar con conceptos tales como “una gran relación de pareja” o “un mejor negocio” sin embargo, el poder viene de enfocarte en conceptos y visiones muy claras y específicas. Imagina y visualiza el éxito de lo que quieres lograr. ¿Cómo será todo cuando tengas éxito?
Una visión clara y comprometida enfoca tu energía y genera poder. ¿Qué es más comprometedor?

Prevé tus resultados como si ya realmente los hubieras alcanzado. “Soy delgado, saludable, energético. Peso “x” kilos, visto talla “x”. Me siento fantástico y la gente me felicita”.
Después, una vez tu nueva realidad es clara, te pondrás metas pequeñas y realistas que harán de puente entre tu visión y tu realidad.

2. Determina la realidad exacta y objetivamente
Una visión no asentada sobre la realidad equivale a soñar despiertos.
Necesitas tener un punto de partida. Cuando tu visión sea clara cuidadosamente date cuenta de dónde te encuentras ahora en relación con el lugar a donde te quieres dirigir.

Infortunadamente, muchos de nosotros no sabemos representar la realidad. En lugar de describirlo, juzgamos. Decimos “todo está perdido” cuando sólo una pequeña porción de nuestra vida va mal, o “todo es maravilloso” cuando no es así. Cuando distorsionamos la realidad, creamos unas bases poco sólidas para tomar acción.

La clave para determinar tu realidad es no juzgar. En lugar de decir que todo está perdido, di que hay un par de interferencias en tu vida pero el 90% de todo tu proyecto funciona bien.
Describir tu realidad establece una sólida plataforma para la acción. También convirtiendo tu actual realidad en un asunto emocionalmente neutral, tu visión se convierte en una fuerza que te mueve a la acción.

3. Mantén visión y realidad juntas en una creativa tensión.
Una creativa tensión es el motor de la creación. Genera energía para la acción. Además nos permite explorar y experimentar sin perdernos.

Para establecer tensión creativa, mantén en tu mente una clara imagen de donde quieres llegar junto con una descripción objetiva de donde te encuentras ahora. Imagina una banda elástica que se estira entre la visión y la realidad actual. La tensión en la banda quiere ceder. Sólo hay tres formas de que eso suceda:
Dejar ir tu visión y renunciar a tus metas
Bajar el alcance de tu visión y tus metas
Mantener una visión firme y cambiar tu realidad de manera que te muevas hacia tu resultado

Mantener tu visión y tu realidad en tensión establece un marco en el cual puedes experimentar, explorar, aprender de experiencias y formar resultados que quieras. El éxito viene de resolver la tensión creativa tomando decisiones que vayan en dirección de tus resultados deseados.

4. Da pasos pequeños. Crea y ajusta.
Muchos de nosotros somos muy perfeccionistas. Porque demandamos que nuestro primer paso sea perfecto, cuando vacilamos, renunciamos. Esto es lo peor ya que el miedo a fracasar nos aleja de comenzar.

En lugar de ello, da pequeños pasos, pasos sencillos. Míralos como experiencias que te enseñan que hacer después. Si tomas una decisión equivocada, toma otra después. Fallar es recibir retroalimentación
Si no estás seguro de por dónde comenzar, trabaja con base en tu visión preguntándote “¿Puedo hacer esto hoy?” Si no puedes, pregúntate, “¿Qué puedo hacer primero?”

Si, por ejemplo, tu visión es estar en forma y con suficiente energía como para correr una maratón, pero te cansas subiendo unas escaleras, obviamente no puedes hacerlo hoy. 

¿Pero qué hacer primero?

Completando varios pasos pequeños creas un patrón de éxitos. Los patrones de éxitos incrementan la seguridad en uno mismo y ayudan a avanzar hacia pasos más largos y construye ímpetu.

5. Ímpetu
El ímpetu te ayudará cuando te falle la motivación. En cualquier momento que te encuentres en adversidad es una oportunidad para construir ímpetu:

1. Date cuenta de lo que te dices a ti mismo y a los demás acerca de la situación.
2. ¿Es consistente con lo que quieres? ¿Es verdad? ¿ Es acertado y objetivo? SI no lo es, entonces hazlo.
3. Entonces pregúntate, ¿Qué quiero? Visualiza una clara imagen de tu deseo.
4. Elige lo que quieres. Di, “Elijo…”
5. Da el paso siguiente que se te ocurra.

Usa esta técnica cuando estés enojado, frustrado, deprimido, o te enfrentes con la adversidad. Esto cambiará tu enfoque de tener un problema a ser creativo y cambiar de estar negativo a estar lleno de energía.

6. Practica, practica, practica
Somos aprendices. Intentamos cosas, corregimos errores, y practicamos hasta que lo nuevo se convierte en natural

La práctica probablemente no nos hará perfectos pero sí nos hará mejores y el camino al éxito siempre irá de mejor a mejor.

Por ejemplo, un cliente quería ser un “buen guitarrista”. Pero debido a que siempre se juzgaba diciendo que no era buena, nunca practicó. Cuando un amigo le mostró una canción country simple de tres acordes, estaba confundida. No era buena, pero pudo tocar una canción.

Yo la ayudé a cambiar su hábito de juzgarse a una más acertada descripción diciendo que por el momento no era buena tocando la guitarra. Comenzó a practicar y en poco tiempo comenzó a tocar bien.

Convertir el éxito en una cuestión de “todo o nada” nos deja a menudo sin nada.

7. Date cuenta de cuándo alcanzas tu meta
No es suficiente decir “Quiero ser exitoso” Sin una guía clara para el éxito eres como un perro que se persigue la cola.

Determina conscientemente tu realidad contra el criterio de éxito que hay en tu visión para darte cuenta si están alineados. Si están, entonces ya lo lograste. Completar una creación genera nueva energía con lo cual puedes iniciar nuevas creaciones. Cunado a Picasso le preguntaron cuál era su pintura favorita, él contestó rápidamente: “¡la próxima!”

Finalmente, Reconoce tus resultados y celebra tu éxito. Comienza con tu próximo resultado. El éxito se construye con éxito.

Recuerda lo que dijo Goethe “Cualquier cosa que puedas soñar, lo puedes hacer, ¡comiénzalo! Hay genio, poder y magia en el valor”

El año pasado un amigo mío puso en práctica este conocimiento y no ha fumado desde entonces.

Bruce Elkin: www.bruceelkin.com
Traducción al español: www.creaturealidad.com