lunes, 8 de septiembre de 2014

Método de autoconocimiento: tu diario personal

Para empezar a escribir tus sentimientos, conocerte mejor y crecer como persona siempre es buen momento. Cualquier día es una fecha ideal para llenar páginas y páginas con palabras que implicarán lo que pasa en tu vida. Es unnuevo punto de partida para ti.

Hay muchas técnicas para auto explorarte, conocerte mejor, resolver problemas y ayudarte a tomar decisiones importantes, ir con un psicoterapeuta, hacer meditación, leer un libro de autoayuda… Pero hay una que es la más barata y eficaz: escribir un diario.

Escribir lo que piensas y sientes es lo mejor para profundizar en ti, descubrir lo que te gusta y lo que no de tu vida e incitarte a los cambios precisos para conseguir tu bienestar.

Cuando escribes, te centras justo en el punto que quieres descubrir, entonces tu mente se pone a trabajar con toda su energía. Aparte de que la escritura te ayuda a separar y eliminar pensamientos secundarios, también te ayuda a concentrarte en un pensamiento y escoger las principales respuestas de entre todas las que te van llegando.

Una de las formas más eficaces para responder tú misma tus preguntas, esas que te haces cuando tienes que tomar una decisión, es la escritura. Contestarte por escrito es una gran ayuda para centrar tu atención, porque en el caso de quedarte en blanco siempre puedes leer las últimas palabras escritas y así podrás seguir el hilo.

Otros expertos y yo te damos estos consejos para que cuando tengas la necesidad de expresarte, puedas tener frutos estimulantes y muy valiosos:
  • Establece un ambiente de calma.El silencio es perfecto para escribir y pensar, aunque también es verdad que puede resultar muy seco… Si lo deseas, puedes poner algo de música suave que deje que tus recuerdos y emociones puedan fluir de manera natural. Siéntate en un lugar cómodo, con buena luz, buena temperatura y que estés segura que nadie te molestará.
  • Escribe lo que quieras. Es normal que haya temas que sean dolorosos, como por ejemplo rupturas amorosas, pérdida de seres queridos… Pero hay otros temas. Temas esperanzadores, como empezar nuevos proyectos o retos personales. De cualquier forma, déjate llevar por tu interior, no hagas nada por controlarlo o limitarlo ni tampoco lo dirijas.
  • Sé completamente sincera. Es fundamental que seas sincera contigo misma. Esta es la única manera de descubrirte y corregirte lo que haga falta. Sabes que tú eres la única que lee lo que escribes, así que hazlo libremente. La vida no se compone de errores o fracasos, sino de experiencias y aprendizajes que nos hacen crecer y cambiar el rumbo.
  • Háblate en primera persona. Es esencial que te hables desde el “yo” porque cuando lo escribes llegas a tu propio interior, te haces protagonista de tus emociones y pensamientos, te ayuda a darte cuenta de quién eres realmente.
  • Sé consciente de lo bueno y lo malo en ti. Desde siempre sabes tus éxitos y tus errores, tus progresos y fracasos, todo está en tu mente. Ahora, con tu nueva herramienta, lo puedes sacar todo a la luz. Ahora podrás mirar tu vida sin obstáculos, te podrás poner más atención y podrás trazar caminos alternativos para mejorar tu vida.
  • No escondas lo desagradable. Cuando, en un momento intenso escribas sobre tus emociones, contacta con tu vida y mira cómo es. Manifiesta lo que te gusta y lo que no y sé consciente de tus aspiraciones y necesidades. Pero no tapes, ni ocultes ni evites tus faltas, tus miedos o limitaciones, porque de esta manera lo único que conseguirás será paralizarte y no conseguirás evolucionar.
  • Escribe acerca de cosas que te ocurrieron en el pasado y no se concluyeron. Sólo de este modo podrás cerrar esas etapas, dejar atrás el ayer y las culpas que vienes arrastrando, y conseguirás comprometerte con el presente.
Escribiendo tu diario podrás ver aquello que te dificulta o impide progresar hacia una vida feliz, conforme vayas entendiéndote y entendiendo ese momento tan íntimo de escribir sobre ti, poco a poco irás superando obstáculos que en este momento los ves como insuperables.

Vanessa Arjona

viernes, 5 de septiembre de 2014

La envidia

En esta entrada hablaremos de la envidia, te explicaré este tema más en profundidad: qué tipo de personas la padecen, cuáles son sus causas y qué podemos hacer para superarlas.

Como siempre, te ofrezco la parte “teórica”, haz tú mism@ el estudio.

La envidia es una sensación natural y es normal padecerla siempre y cuando no domine nuestra vida y sentimientos. Puede hacer sufrir a mucha gente (tanto al envidioso como a la víctima) Ya sea oculta o visible, la envidia es un sentimiento de frustración con respecto al bien de otra persona, a la cual lo único que se le desea es herirla. Pero, ¿por qué?

La persona envidiosa es alguien que no está satisfecha (por inmadurez, frustración, cualquier motivo que ni él mismo sabe). Por eso lo único que siente hacia otras personas – de manera consciente o inconsciente – es rabia, mucha rabia porque tienen algo que ellas no tienen (ya sea dinero, belleza, éxito, libertad, personalidad, etc.), algo que él desea realmente pero no quiere o no puede conseguir.

En lugar de aceptar su situación, lo que hace es odiar e intentar destruir a toda persona que tenga lo que ella anhela; así es como se defienden las personas fracasadas y acomplejadas.

Este sentimiento va muy relacionado con el egocentrismo, pues la persona envidiosa tiene ansiedad por destacar, quiere ser el centro de atención: ganar, quedar por encima,etc. Su único objetivo es el de ser mejor en cualquier situación. Por esta razón, son muchas las personas que se sienten continuamente amenazadas con cualquier éxito ajeno. Viven en una permanente competición contra todo el mundo. Ya no se trata de desear algo que tienen otros, sino dedesear lo que los demás tienen como forma de incrementar su autoestima.Esta manera de sufrir es muy triste ya que esclaviza a la persona.

Desgraciadamente, existen varias formas de expresar la envidia, a través de: críticas, calumnias, dominación, ofensas, rechazo, rivalidad, venganza, agresiones,etc.

Normalmente, una persona envidiosa lo será de aquellas personas más cercanas a su entorno, es decir, entre iguales ( hermanos, primos, vecinos, etc).

La envidia no tiene porqué ser siempre un sentimiento malo; algunas veces, cuando deseamos algo que otro tiene, podemos generar un impulso para así superarnos e ir en la dirección de conseguir nuestros objetivos. En este sentido, la identificación y la imitación serán habilidades de maduración personal.

A continuación, si eres envidios@, te ofrezco algunos consejos para superar la envidia:

- Acéptala como algo natural y quítale la parte negativa.
– Manipula todos los sentimientos que procedan de la envidia.
– Conócete y acéptate con todos tus defectos y virtudes.
– Perdona tus propios obstáculos.
– Ajusta tus deseos a tus posibilidades.
– Aprende a que te guste todo lo que puedes hacer con lo que tienes.
– Reconoce que hay personas que provocan envidia.
– Evita todas las comparaciones inútiles durante la niñez.
– Educa a los niños para que sean solidarios y se alegren del bien ajeno.

Por último y para concluir, creo que cuanto más insatisfecha o débil es una persona, más envidiará a la gente. La envidia tiene cura, mediante un tratamiento de crecimiento y desarrollo personal, pero ésta es posible solamente si resuelves y tomas conciencia de tus propias carencias.

LAS PERSONAS MADURAS NO ENVIDIAN A NADIE!!

Vanessa Arjona


jueves, 28 de agosto de 2014

Compromiso vital

La vida nos transporta, nos empuja hacia delante. Unas veces de manera violenta, otras veces más tranquila… Y en los momentos más difíciles se limita a darnos un impulso para sobrevivir. En cualquier caso, algo en nuestro interior nos pide vivir, dándonos energía para el siguiente paso a seguir el camino. Puede que sea un deseo intenso que nos lleva a hacer algo con nuestra propia vida considerando nuestra particularidad y capacidades. Porque de no ser así nos debilitaríamos.

No hace falta que sea un acto heroico, es mucho más sencillo…. con dar amor, basta. En un entorno tan cercano y sencillo como el familiar. Tal vez sea una tendencia a opinar, conocer, cuidar, a fabricar. Normalmente, este camino personal se puede resumir en una sola palabra: “Hazlo”, “ve”, “da”.

CONEXIÓN INTERIOR

Tal vez nos preguntamos qué intención nos recorre y cuál será la que tendrá que orientarnos. Cuanto más la vivamos y sintamos, más serenidad experimentaremos, también si ese conflicto que se obtiene con uno mismo necesita empeño y esfuerzo.

Consiste ni más ni menos, que en colaborar con la misma naturaleza. Con los dones que nos han sido otorgados y que debemos transmitir. Consiste en respetarse y conseguir que todo sea mucho más fácil y se mantenga sin ningún soporte adicional, igual que si fuera un edificio bien cimentado que no requiere de ningún apoyo.

Reparar en los deseos y sueños conlleva dejar de dedicarle a acciones insignificantes la energía y el tiempo que nos hace falta para nuestros objetivos. Se trata de no pasar la vida derrochando, malgastando el tiempo, sino de darle a esos deseos un tiempo y un lugar en la vida diaria.Hacerles sitio en el presente, traerlos desde ese supuesto futuro en que se encuentran. Y en dirección a donde se deben encaminar de ahora en adelante.

“Venimos al mundo con dones y expectativas personales que nos empujan a transitar un camino. El hecho de vivir para desarrollar los deseos más íntimos derrocha paz y armonía e intensifica cada momento”.

Vanessa Arjona